Los azulgrana, muy justos de fuerzas, cayeron en ante un Bilbao despiadado; Aduriz, con un hat-trick, y San José condenan a un Barça que tardó 45 minutos en patear al arco.
Tal como lo había anticipado Luis Enrique, técnico de Barcelona, no fue un partido fácil. Tampoco la intensidad de Athletic de Bilbao contribuyó a que lo fuera para el conjunto azulgrana, al que los locales secaron hasta el punto de retrasar su primer tiro al arco hasta el tiempo de descuento de la primera mitad, cuando Leo Messi remató al arco y forzó el lucimiento de Gorka Iraizoz.
Media hora antes de esta primera acción de peligro de Barcelona, Mikel San José había adelantado a los vizcaínos con un golazo desde el mediocampo, tras un mal rechazo con la cabeza de Marc-André Ter-Stegen. Hasta entonces, los dos equipos se habían estudiado sin apuro, calibrando las fuerzas sin precipitarse, hasta que el Athletic se decidió a enseñar los dientes.
Barcelona se mantuvo fiel a su juego pero sin profundidad. En el medio, Alcántara, Sergi Roberto y Javier Mascherano, desbordados, no consiguieron imponer ni pausa ni claridad en el juego y Messi optó por retrasar su posición para intentar ordenar al equipo. De nuevo, el Athletic impidió la reacción con autoridad y forzó a los azulgranas a recurrir al juego largo, fijando a Luis Suárez como única referencia.
Media hora antes de esta primera acción de peligro de Barcelona, Mikel San José había adelantado a los vizcaínos con un golazo desde el mediocampo, tras un mal rechazo con la cabeza de Marc-André Ter-Stegen. Hasta entonces, los dos equipos se habían estudiado sin apuro, calibrando las fuerzas sin precipitarse, hasta que el Athletic se decidió a enseñar los dientes.
Barcelona se mantuvo fiel a su juego pero sin profundidad. En el medio, Alcántara, Sergi Roberto y Javier Mascherano, desbordados, no consiguieron imponer ni pausa ni claridad en el juego y Messi optó por retrasar su posición para intentar ordenar al equipo. De nuevo, el Athletic impidió la reacción con autoridad y forzó a los azulgranas a recurrir al juego largo, fijando a Luis Suárez como única referencia.
Sin embargo, las imprecisiones, tanto en defensa como en ataque, impidieron toda reacción hasta que Pedro Rodríguez provocó la falta con la que Messi obligó a intervenir por vez primera a Iraizoz justo antes del descanso.
El partido subió sus decibeles en el segundo tiempo. A los cinco minutos Pedro y Messi pudieron lograr la igualdad pero no lo lograron y el Athletic se agrandó: a los ocho minutos puso el 2-0 en el marcador después del cabezazo de Aritz Aduriz, que conectó un delicioso centro de Sabin Merino desde la derecha.
Luis Enrique quiso cortar por lo sano y mandó a la cancha a Iniesta y Rakitic, pero ya era tarde. En el minuto 17, Dani Alves se complicó al sacar del área y terminó regalándole a Aduriz otra posición cómoda para poner el 3-0. El mismo Alves provocaría, después, el penal con el que Aduriz consumaría su hat-trick y anotaría el 4 -0 definitivo.
El Barça buscó, a partir de entonces, el gol de manera desesperada y cada vez con menos criterio, pensando únicamente en un tanto como visitante que le permitiera pensar que la remontada es posible en el Camp Nou. Pero con los nervios a flor de piel no hubo más suerte y el Athletic Club dio prácticamente por sentenciada una eliminatoria que puede darle su primer título en 31 años. Mientras, en Barcelona se encienden las alarmas ante la falta de personalidad del equipo cuando faltan algunos titulares.
El partido subió sus decibeles en el segundo tiempo. A los cinco minutos Pedro y Messi pudieron lograr la igualdad pero no lo lograron y el Athletic se agrandó: a los ocho minutos puso el 2-0 en el marcador después del cabezazo de Aritz Aduriz, que conectó un delicioso centro de Sabin Merino desde la derecha.
Luis Enrique quiso cortar por lo sano y mandó a la cancha a Iniesta y Rakitic, pero ya era tarde. En el minuto 17, Dani Alves se complicó al sacar del área y terminó regalándole a Aduriz otra posición cómoda para poner el 3-0. El mismo Alves provocaría, después, el penal con el que Aduriz consumaría su hat-trick y anotaría el 4 -0 definitivo.
El Barça buscó, a partir de entonces, el gol de manera desesperada y cada vez con menos criterio, pensando únicamente en un tanto como visitante que le permitiera pensar que la remontada es posible en el Camp Nou. Pero con los nervios a flor de piel no hubo más suerte y el Athletic Club dio prácticamente por sentenciada una eliminatoria que puede darle su primer título en 31 años. Mientras, en Barcelona se encienden las alarmas ante la falta de personalidad del equipo cuando faltan algunos titulares.
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